La luz y su fragilidad.
Mejor que no busquéis, sí no estáis dispuestos a pagar el precio. Mejor que os quedéis en el espacio iluminado sin saltar al lado de las sombras. Hay ráfagas de sublime experiencia vital pero sólo eso...ráfagas. Es mejor no buscar la verdad al sinsentido, pues aunque llegues a su proximidad, siempre te quedarás en vísperas del todo...tú, yo, Albert Einstein; y todo ser humano que rompe la linealidad de su camino en busca de atajos para encontrar la verdad o la causa de su ambición. El precio a pagar es más alto que la recompensa, siempre es más alto. Sólo los estúpidos con fachada social se llenan por dentro, se llenan de su propio acercamiento al camino....pero se quedan sin poner un pie en él. Sólo adquieren la apostura del que mira hacía abajo el abismo sin haberlo escalado.
Manuel Sáenz.



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