EL QUE PAGA DESCANSA
Harto de amenazas y posibles navajazos a la faltriquera; madrugué, me duché, y pagué la deuda. No es doblar la cerviz ante papá Estado; es, simplemente, aburrimiento y asco. Hay que ser solidario. Contribuir a los despilfarros y vicios, sanos y malsanos de unos sinsorgos chupocteros de cualquier color y condición que se están cargando mi patria. ¡Oh, patria! Que antiguo, dirán los modernetes. Pues sí. Golfo mientras se pudo, sabiniano de barra, raya, buena jaca de saldo y esquina; pero patriota. Anarquista pero muy español. ¿No lo entiendes? Es problema tuyo.
Ahora llueve. En indolora cesarea el cielo descarga su fruto maduro. Está mañana en mi paseo presidiario, por si acaso; vuelta y vuelta al parque, me sorprendieron unos gorriones cantores. Aquí, a la higuera, no se acercan. Son listos los gorriones de canalera. Los felinos acechan y apuestan por carne fresca. ¡Suertudos! Saben como librarse. Nosotros, dulcemente condenados, pagamos la fiesta de los demás y nuestro propio entierro.
¡Aleluya!
Ahora llueve. En indolora cesarea el cielo descarga su fruto maduro. Está mañana en mi paseo presidiario, por si acaso; vuelta y vuelta al parque, me sorprendieron unos gorriones cantores. Aquí, a la higuera, no se acercan. Son listos los gorriones de canalera. Los felinos acechan y apuestan por carne fresca. ¡Suertudos! Saben como librarse. Nosotros, dulcemente condenados, pagamos la fiesta de los demás y nuestro propio entierro.
¡Aleluya!

Comentarios