Cuando rien las bragas

Sobre los armarios, en los mas intrincados rincones, sobre las lamparas
sobre ordenadores muertos, sobre impresoras llenas de polvo, sobre botellas de vino
rien las bragas de las alegres mujeres.
Sobre despedidas, numeros de telefono mal apuntados, erroneas noches de olvido
rien sonrientes bragas de todos los tamaños y colores.
Las palabras quedan, los olores quedan, los recuerdos orograficos quedan,
las risas, la decepción desnuda, benditos veranos de luna celosa asomada a la ventana.
Corta el cuchillo el pan, unta el tomate que bendice el aceite, el oloroso café se expande.
La playa, los cuerpos desnudos, el sol rompe la magía
casi cincuenta años encima
vuelvo a las sombras, al aleteo infalible del ventilador
abro una cerveza
y con un poco de suerte
una olvidada braga me sonrie.
¿Esta argentina me hablo de Cortazar y de las maneras de subir una escalera?
Agachate, maldito, recoge la prenda y preguntale a la siguiente, cual es su color preferido.